Endemoniados

ENDEMONIADOS


Endemoniado: dícese del que esta poseído por el Demonio
la creencia en el Diablo es un dogma de fe
al igual que la creencia en Dios, si existe la bondad Divina
existe la maldad y la maldad consiste en alejar a los hombres del camino de la salvación. La doctrina católica enseña que los demonios son ángeles caídos a causa de su pecado, seres espirituales de gran inteligencia y poder; la potencia de Satanás, sin embargo, no es infinita. No es más que una criatura, potente por el hecho de ser espíritu puro,

La historia Humana esta desde su principio en una lucha entre el bien y el mal, somos Caín y Abel en pugna contra nosotros mismos, contra nuestros instintos mas arcaicos, la lucha es dura y continua, siempre valorando
nuestros actos y las consecuencias de ellos
no podemos ser espíritus puros como Satán o Gabriel…

La posesión es ese lado oscuro, nuestra sombra que acecha,
posiblemente la posesión sea una enfermedad mental aun sin catalogar
al igual que la exaltación mística puede provocar visiones divinas levitaciones (Sta Teresa) o estigmas (Padre Pio) la creencia absoluta en el diablo puede provocar al individuo la posesión dejando salir de si mismo esa maldad que todos llevamos y que, de alguna forma aun desconocida, poder entrar en contacto con ese legado que todos llevamos desde el principio de la vida en la Tierra, al igual que genéticamente esta grabado nuestro color de ojos… de piel o las enfermedades que podemos sufrir
también esta grabado en nosotros la historia de la Vida,
lo que en muchas creencias llaman los Archivos Akasicos
poco o nada sabemos del mayor reto que tenemos, nosotros mismos,

Nuestro cerebro continúa siendo desconocido,
sabemos donde esta localizado el habla…el oído...
pero nada sabemos sobre nuestros pensamientos y sentimientos en que zona se desarrollan, dicen que en toda corteza cerebral, millones y millones de neuronas conectándose y desconectándose para producir las sensaciones, viajando la información a la velocidad de la luz,
nuestro consciente ocupa un 15 % y nuestro inconsciente un 85%
el es el autentico receptor de todo que ocurre en nuestro entorno, una persona fácilmente influenciable es capaz de sentirse poseída por un demonio tras una sesión de ouija por ejemplo o tras haber visto algo que no ha sabido procesar, la ingesta de drogas produce estragos en nuestro cerebro, como en el caso de Nuria que se creyó poseída por el diablo
y fue a que le hicieran un exorcismo, o una esquizofrenia sin diagnosticar
recuerdo a un compañero que veía salir demonios y monstruos de las paredes y del suelo intentando a tacarle, a pesar de mi insistencia de que fuera a un psiquiatra, no pude convencerle, su fe en que era un visionario y solo tenia que aprender a canalizar sus visiones le privaban de pensar un poco mas allá

Puede haber casos de posesión verídicos, como no, jamás hay que dejar las puertas cerradas a nada, vivimos un mundo aun por descubrir en el cual
todo puede ser posible.

EL RITUALROMANO

1. El exorcista coloca un crucifijo ante el poseso.
2. Ordena al diablo que se limite a contestar.
3. No debe creer nada de lo que oiga o vea hacer al poseso
4. Le pregunta el número y el nombre de los «entes malignos» que lo poseen y la fecha de la posesión.
5. Hace la señal de la cruz o aprieta la estola en las partes del cuerpo donde más se acuse una alteración.
6. Rocía con agua bendita el cuerpo poseído.
7. Repite las oraciones que más atormenten al poseso.
8. Pregunta al diablo por el móvil de la posesión y la zona del cuerpo donde se encuentra.
9. Impone las manos sobre su cabeza.

10. Conjura al demonio: «Te conjuro, Satán, enemigo de la salvación humana, / reconoce la justicia y la bondad de Dios Padre, / que con justo juicio condenó tu soberbia y envidia. / Aléjate de este siervo de Dios [dice el nombre], / que el Señor hizo a su imagen, / lo adornó con sus dones y lo adoptó como hijo de su misericordia. / Te conjuro, Satán, príncipe de este mundo, / reconoce el poder y la fuerza de Cristo, / que te venció en el desierto, / prevaleció en el huerto, / te despojó en la cruz / y volviéndose a levantar del sepulcro / tu victoria llevó al reino de la luz. / Retrocede de esta criatura, / que al nacer lo hizo hermano suyo / y muriendo lo adquirió con su sangre. Amén».